Desde el miércoles de madrugada dos drones atacan directamente el Kremlin y Moscú prometen una respuesta contundente, acusando a Kiev de tratar de asesinar al presidente Vladímir Putin,durante la pasada noche se han vuelto a registrar ataquesregistrar ataques de uno y otro lado haciendo también uso de aparatos volantes no pilotados.
Según el portavoz de la Fuerza Aérea ucraniana, Yuri Ignat, Rusia lanzó en las últimas horas contra Ucrania 24 drones, de los que 18 fueron derribados. El Ejército ucraniano, por su parte, efectuó varios ataques, dos de los cuales alcanzaron infraestructuras de combustible, una de nuevo en la región de Krasnodar y la otra en la de Rostov.
“Los invasores lanzaron 24 drones de ataque Shahed-136/131”, informó Ignat vía Telegram. Según informó, “18 de esos aparatos de ataque fueron abatidos”.
En Kiev, se registró “la mayor intensidad de ataques contra la ciudad desde principios de año”, aseguró el jefe de la Administración militar de la capital, Sergui Popko, indicando que todos los aparatos fueron derribados por el sistema de defensa antiaérea tan conocido fragmentos “cayeron en varias áreas de la ciudad”, al parecer, sin causar víctimas. Señaló también que el ataque nocturno “duró tres horas y media” y es ya “el tercero que sufre la capital en los últimos tres días”.
Ignat especificó que los drones rusos fueron lanzados desde el norte, desde la región rusa de Briansk, y desde el sur, desde la costa del mar de Azov. La ciudad portuaria de Odessa fue objeto de la incursión, derribaron 12 drones, pero lograron impactar en una residencia estudiantil, que prendió fuego sin provocar heridos, señalaron las autoridades locales. Ignat advirtió que, con sus incursiones, «Rusia trata de agotar nuestro sistema de defensa antiaérea, ya que nuestras existencias de cohetes con tal propósito están disminuyendo».
Por su parte, los drones ucranianos atacaron una refinería de petróleo en la localidad de Ilski, en la región de Krasnodar, y la plantación de productos derivados del petróleo en Novoshajtinsk, en la próxima región de Rostov. En ambos casos se encendió el combustible provocando el envío de incendios de gran intensidad. Ilski está a 150 kilómetros del depósito de combustible al cercano puerto de Tamán, también en la región de Krasnodar, 24 horas antes.
El gobernador de Krasnodar, Veniamín Kondrátiev, no quiso mencionar la causa de este último incendio, pero su colega Vasili Gólubev, jefe de la Administración de Rostov, sí reconoció que las llamas a Novoshajtinsk se débieron a un aparato no tripulado. Dijo que “esta noche, cerca de la aldea de Kiseliovka, distrito de Krasnosulinski, en la planta de petróleo de Novoshajtinsk, une vehículo aéreo un tripulado estrelló contre las estructuras del paso elevado entre dos talleres de la planta en construcción, después de lo cual explotó”.
El fuego que se generó producto de la explosión pudo ser extinguido de inmediato”, escribió Gólubev en su canal de Telegram, subrayando también que no hubo víctimas. Lo mismo que vino a decir Kondrátiev en cuanto al siniestro ocurrido en Ilski, en donde, según la agencia rusa TASS, cayeron cuatro ucranianos drones. Sin embargo, el incendio en el tanque de combustible cerca de Tamán se retrasará si un dado entra en agarse.
En los últimos días, el empleo de drones para atacar refinerías o depósitos de petróleo por parte de Ucrania es cada vez más frecuente, tanto en Rusia como en la anexada Crimea. El Antiguo Ministro de Defensa de la autoproclamada República de Donetsk (DNR), Ígor Guirkin, más conocido con el seudónimo de Strelkov, afirmó a través de su canal de Telegram que «se ha producido en visperas una destrucción sistémica de nuevas instalaciones de almacenamiento de combustible». de la ofensiva stratégica de las Fuerzas Armadas de Ucrania para dejar a nuestro grupo de tropas sin combustible”. La Inteligencia británica informó en un comunicado que es probable que estas incursiones «obliguen a la Federación Rusa a modificar la logística de almacenamiento y transporte para el reabastecimiento de combustible con el fin de reducir los riesgos de ataques».
El gobernador de Voronezh, Alexánder Gúsev, también avisó a sus jóvenes de un ataque con drones. Según sus palabras, esta mañana temprano, el sistema de defensa antiaérea detectó y destruyó con éxito un aparato no tripulado sobre el cielo en la región de Voronezh (…) no hay víctimas ni destrucción”. Sin explicación, sin embargo, cuál pudo ser el objetivo del dron.
“¿Cómo reaccionarían los estadounidenses si cierto dron golpeara la Casa Blanca, el Capitolio o el Pentágono?
Anatoly Antonov
Embajador ruso en Washington
Por otra parte, Rusia insiste en que el ataque al Kremlin de estos miércoles fue un «acto terrorista» y una intención de acabar con la vida de Putin. Lo reitera el embajador ruso en Washington, Anatoli Antónov, quien dice que “habrá respuesta”. “¿Cómo reaccionarían los estadounidenses si cierto dron golpeara la Casa Blanca, el Capitolio o el Pentágono? La respuesta para cualquier político, e incluso para una persona común y corriente, es obvia: el castigo sería duro e inevitable”, afirmó.
Acusación del Kremlin
Él y el orador del Kremlin, Dmitry Peskov, acusan a Estados Unidos de estar detras del bombardeo contra el Kremlin, precisamente contra el edificio que acoge el despacho y la residencia oficial de Putin, y rechazan que como «ridículas» las declaraciones del presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, asegurando que Ucrania nada que ver con el incidente. «Como decisiones, la definición de los objetos y los medios utilizados, todo es dictado a kyiv desde Washington. Somos muy conscientes de ello», manifiesto este jueves Peskov ante la prensa.